Bienvenidos

He creado este blog para acercar a la gente unos breves conocimientos sobre economía, de tal manera que puedan llegar a entender ciertos aspectos del día a día del ámbito económico.

Las publicaciones que hago van relacionadas bien con conocimientos económicos, para que os sean más cercanos, o bien con artículos de opinión. Estos últimos son variados, pudiendo ser críticas sociales o comentarios sobre noticias y declaraciones que hayan estado surgiendo en los medios.

Las fuentes de las que obtengo la información es o bien de periódicos especializados en economía o bien de libros universitarios o bien de mi propia experiencia. Si alguien ve algún error, por favor no dude en comunicármelo y así podré corregirlo, al igual que si queréis que realice alguna entrada en especial.

Por último agradecer los comentarios que recibo por email, gracias por vuestro apoyo!!

martes, 4 de junio de 2013

El contrato único ¿Es de verdad una solución?

El Contrato Único es una propuesta que viene de Europa y a lo que nuestro Gobierno se ha negado a aplicar en redondo porque, según dicen, reducen los derechos de los trabajadores. Que di tu que a estas alturas, que el Gobierno me hable de "derechos" y "trabajadores" en la misma frase ya me parece algo insólito.

Como todo en esta vida, el Contrato Único tiene su parte buena y su parte mala, depende de quién la mire. Lo que se propone con este contrato es que todos los contratos sean indefinidos, por lo que los que están con contratos temporales les protegerían un poco más, pero los que tienen contratos más beneficiosos, se verían desprotegidos. A su vez se propone que la indemnización sea creciente en el tiempo, de tal manera que cuanto más tiempo trabajes, más cobrarías en la indemnización. Respecto a las prestaciones, se propone que cada empresario o contratante realice aportaciones a un fondo a nombre del trabajador, de tal manera que si eres despedido, cobras de ese fondo. Si no utilizas el fondo nunca o solo parcialmente, lo que sobra se sumaría a tu pensión.

Así explicado parece que no pinta mal la cosa para los que están contratados temporalmente. Pero me surgen algunas preguntas, como si esta medida tendrá efectos retroactivos y la gente que lleva trabajando 20 años ganándose sus derechos laborales se les tire por la borda todo lo que han conseguido. Y no me estoy refiriendo a banqueros y presidentes de grandes compañías, me refiero a gente normal y corriente que ha conseguido prosperar en una empresa. Habrá que tener cuidado, en caso de que salga esta proposición, de cómo se trata a esa gente, que básicamente son mayores de 45 años y que junto a los jóvenes, suponen un porcentaje altísimo de parados. 

Otra duda que me surge es el tema de la indemnización. Pongamos el ejemplo del turismo, que cada verano se contrata en nuestro país a bastante personal, única y exclusivamente para la temporada estival. Con este contrato, en principio, se indemnizará de la misma forma a una persona que es su primer verano sirviendo copas en un restaurante, que a una persona que lleva diez años sirviendo copas. ¿Cómo se va a primar la experiencia en estos casos? Y este no es un caso aislado, pongamos el de las vendimias, el de eventos deportivos, temporadas de pesca, etcétera. 

La tercera y última pregunta que me hago es sobre las aportaciones. Ahora en nuestra nómina, la empresa nos retiene una cantidad para el pago del IRPF. Se supone que esas retenciones te dan derecho a unas prestaciones. Lo que veo con este contrato es que el mecanismo es el mismo, pero en vez de dárselo al Estado para que él lo invierta y después te pague las prestaciones, serás tú el que te gestiones el fondo y que cuando se te acabe, el Estado puede que venga a socorrerte. Los defensores de este contrato aseguran que así se favorece la búsqueda activa de empleo, y normal, porque en cuanto el fondo se te acabe, dejas de cobrar y sin dinero no hay comida ni cama. Lo que me preocupa es quién va a gestionar los fondos de los trabajadores, dada la incultura financiera que tenemos (cosa que con la LOMCE se sigue sin abordar).

Los defensores también dicen que se disminuiría la rotación de los puestos de trabajo, pudiendo ofertar formación de más calidad y favoreciendo así la productividad. Yo a esto le veo dos lagunas, la primera es que si contrato a una persona para la temporada veraniega, qué me impide a mi echarle de la misma manera que antes. La segunda es que en momentos como el de ahora, con una tasa de paro tan alta, si no favorezco las rotaciones, doy de alimentar a una sola persona mientras que si contrato una cada mes, alimentaré a más gente. Cuando la economía se mejore, sí se podrá contratar y formar a trabajadores para que sean más productivos, pero entonces no veré ninguna diferencia con un contrato indefinido normal, salvo por la indemnización.

Lo que es cierto es que si se decide, que no están por la labor, de aceptar este modelo de Contrato Único Indefinido, habría que darle una vuelta para adaptarlo a nuestra economía. Nosotros no somos como otros países en los que su economía no está tan ligada a las temporadas (vendimia, turismo).

No hay comentarios:

Publicar un comentario